Dia 6-7-8: Al otro día de acampar en Sigean, con un viento increíble durante toda la noche y con mis tampones de papel higiénico para los oídos, al otro día el tiempo mejoró, lo cual me permitió llegar hasta Beziers, en donde paso la noche. el ánimo mejora, sin embargo la ciudad el sábado de noche no se mueve mucho.
Mientras iba para Beziers, la naturaleza llamó en la mitad de la ruta... ahh nada como abonar la tierra al costado de la carretera y los autos que pasan y tocan bocina y alee alee la france!
Al otro día después de la tormenta:
Vista desde Beziers hacia España:
Al otro día salgo para Sete, de donde a mitad del camino me encuentro con una señora de Montpellier que me acompaña hasta Sete, y hacemos un pequeño picnic improvisado en la playa. igualmente el primer domingo del viaje, el ambiente es de domingo tanguero.. melacólico y triste y la frente marchita.
Ruta destruida por el mar:
Los siguientes dos días, en camino a Avignon, paso por la Camargue, por Aigues Mortes, y mientras almorzaba en Terrascon, veo pasar una pareja de ciclistas, a los cuales no puede dar alcance (no en este día al menos, seguramente vayan en ruta para el este). Igualmente muy poca sociabilidad en esta primera semana del viaje.
Flamencos: